Algo empieza a inquietarme. Soy una verdadera desconocida que ha cruzado el umbral del corazón de la persona donde estoy viviendo y nadie sabe nada. Todo con calma y cuando esté muy lejos, para posibles consecuencias.
Eso me hace sentir mal, la verdad.
No han sido las mejores condiciones para conocer a nadie por la urgencia, reconózcolo, pero he llegado siendo "una chica de Valencia", nada más. Las cosas se complican así, porque mi manía persecutoria me hace ser forzada y no natural. Está mal no comportarme tal cual soy por miedo a que me echen del lugar... o peor aún, que se queden con un mal recuerdo de alguien que sólo quiso que la reconocieran como alguien bueno, sin más.
Estoy abatida, no puedo evitarlo. Hoy iré a que me lleven a pasear, veremos cómo se presentan las cosas y cómo las soluciono. Porque si tengo algo claro es que si no hago algo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario