sábado, 5 de mayo de 2007

Sick and Sad

Estoy harta de que las cosas no salgas como yo lo deseo. Hoy es sábado a las 10.25 y estoy tumbada en mi cama, con miedo a levantarme y caerme, o a que me vuelvan a dar las arcadas y tenga que salir "corriendo" al baño. Ayer casi me da algo quitando bandejas, me temblaba hasta la punta del pelo y estaba blanca como la pared. Me mandaron a casa y no pude ni acabar mis horas, cuando ya iba por la mitad de la faena. Y ahora me siento inútil por no haber podido hacerlo, por no poder resistir hoy tampoco.

Creo que esa debilidad, más que otra cosa, se debe al cansancio que estoy acumulando estos días, tanto mental como físico. No puedo seguir por el camino que voy o acabaré realmente mal. Es estúpido pero sigo esperando un milagro. Kiss me like you did... No, realmente no estaría nada mal.

¿A qué estoy esperando para rehacer de verdad mi vida? ¿Cuánto tiempo pretendo estar esperando con una estúpida esperanza? Ya no es que esté o no esperando, es que tengo la desilusión de que no podré volver a enamorarme nunca, y eso me hace sentir culpable y tristísima. Porque en el fondo tampoco quiero que mi mente la inunde otra persona, sólo quiero verle a él todas las mañanas cuando me levante, compartir conversaciones a todas horas... Que no me vea como un estorbo para él, sino algo que tiene que estar ahí.

Cuánto lo deseo...

No hay comentarios: